sábado, 13 de septiembre de 2014

13-09-2014 deXpeñarrubias



Nada me hizo presagiar lo que se nos venia encima cuando la noche anterior vi llegar al Chule y a Javi (Venancio) que es que hay muchos Javis, en un todo terreno, bien entrada la noche, que venían de inspeccionar la ruta ¿¿¿???

Nueve y cuarto de la mañana. Las fotos de rigor, el retraso de rigor, mucha ausencia de Jotas y un total de al menos veinte o veinticinco insensatos, lo que viene siendo, nos ponemos en marcha con el animo de hacer la Despeñarrubias clásica, sin variaciones, ja,ja,jaaaaa... pues eso, insensatos, que parecéis nuevos.

Comenzamos a buen ritmo para subir y bajar las Boquerillas. Nada digno de reseñar salvo el magnífico estado del ascenso que no ha estado tan bien en ninguna de las ediciones, y ya son unas cuantas. Reagrupamiento en Bonilla, incluso con la Despe chica, que llegan a Bonilla frescos y con muchas ganas poniendo rumbo al avituallamiento.
Nosotros ponemos rumbo a la Fuente de la Cueva. Gran ascenso que coronamos con éxito... y empiezan los cambios. El descenso tradicional es imposible porque la naturaleza se ha adueñado del sendero de bajada. Es una maraña de arbustos y zarzas imposible de atravesar por lo que toma las riendas Javi (Venancio) para acometer el descenso por otro sitio si cabe hasta mejor... y una mierda¡¡¡¡ Tras atravesar un campo arao y bien arao, tomamos el sendero de bajada perfectamente trazado y sin perdida, que sortea los bancales de pinos y nos lleva directamente al avituallamiento. El que siguió a Javi bien, pero el resto nos perdimos entre los bancales porque de trazado y bien trazado nada de nada. Allí quedamos en lo alto del cerro entre pinos y aliagas sin saber por donde se bajaba. A lo lejos, abajo, muy abajo veíamos el avituallamiento y como iban llegando Javi y cuatro mas, mientras maldecíamos y blasfemábamos entre dientes. Milagrosamente, sin saber muy bien como, bueno si, por el medio del monte, conseguimos llegar abajo y milagrosamente todos sanos y sin pinchazos en las ruedas.

Avituallamiento de lujo, donde corrían los bocadillos de chorizo, el queso de la ermita y la cerveza para unos y los zumitos, el agua y la fruta variada para otros. A discreción, en abundancia, lo mejor de la mañana.

Mientras la Despe chica salía para seguir rodando por zonas mas tranquilas y ciclables nosotros puestos a cambiar ¿porqué no subimos al Viso y nos tiramos por el camino que llevo cinco años buscando y nunca he encontrado? Pues sea, con un par de narices. 
Subida muy exigente al Viso del Pinar, que pone en su sitio al que se ha saciado de chorizo y cerveza. En lo alto coge las riendas Chule... mal rollo... se avecina el descenso. Entre pinos, ramas, piedras, surcos y yo que sé que más, comenzamos un vertiginoso descenso (a pie) que hace las delicias de algunos y que sube el índice VTPC (Vete a Tomar Por Culo) de la ruta de manera ostensible. Normal que lleve cinco años buscándolo, es que NO EXISTE, es mentira. Dicho descenso nos deja directamente en el valle y tras arreglar algún pinchazo decidimos cruzarlo y ascender a Verdelpino, para bajar al pueblo por el famoso camino de la Falsomera que ya que han estado arreglándolo este verano, quedaría feo no estrenarlo.

Ascenso mas que exigente a Verdelpino, con rampas interminables con porcentajes exagerados que culminamos con éxito, entrando en el pueblo y parando en sus fuentes a refrescarnos porque llegamos verdaderamente agotados. Menos mal que ahora viene el descenso al pueblo por el camino de la Falsomera... y otra mierda¡¡¡¡¡

El tal camino descender, descender, desciende mas bien poco y arreglado, arreglado, mas bien poco también. Os explico el arreglo. Unos comenzaron a arreglarlo por Verdelpino y otros por Caracenilla, de tal manera que el inicio y el final del camino están perfectamente trazados y reconocibles, pero a nadie se le ha ocurrido unir los dos extremos por lo que lo de en medio es versión libre entre aliagas, por la falda de un monte que si te equivocas ruedas cinco metros para abajo y vuelta a subir. Al final este descenso se convirtió en lo mas duro de la jornada, de tal manera que a nuestra llegada a Caracenilla las cervezas corrían de dos en dos y sin desmontar de la bicicleta.

Jornada dura, dura, pero entre buena gente, que lo pasamos muy bien, hombre. Después paella sin las tradicionales moscas que hace que se pierda un poco el encanto rural de la ruta, pero que se hace bastante más tranquila. Se agradece. Como colofón y como coincide con la fiesta original de Caracenilla, noche amenizada en la plaza con orquesta, hoguera y zurra y después una barbacoa en casa Edu de las que hacen afición. Osea Jotas, que si no venís por la ruta, teneis que hacerlo por la paella y sino por la barbacoa. A ver si vais cogiendo el hábito de esta CLASICA.

Datos curiosos:
- Al final hicimos un total de 36 Km en cinco horas, que parece mucho tiempo, pero entre el avituallamiento, pinchazos y lo exigente de la ruta no está nada mal.... La Despe chica hizo 38 Km... mas que nosotros... pa´mearse y no caer ni gota, ja,ja,jaaaaa
- Ayer estuve arreglando mi bicicleta. Dos ruedas absolutamente pinchadas, dos cámaras nuevas y de veinte a treinta pinchos retirados de las cubiertas. Y eso que llevaba banda antipinchazos y cámaras con moco verde. Parecían un colador... pa´tirar, Michelin última generación con protecciones que parecían cubiertas mas que cámaras... otra mierda¡¡¡¡¡ ja,ja,jaaaaa.
- VTPC muy elevado., Algún día volveremos a la Despeñarrubias clásica de verdad ¿que tal el año que viene?
el Maestro.




Galeria de Fotos 98Análisis IBPindex

3 comentarios:

  1. Buena crónica maestro.
    A mi también me pareció dura la ruta. Pero por las subidas más que por las bajadas jajajaja....
    En lo que sí coincido es en que fue un gran día y que se echó de menos a muchos jotas.

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  2. Bien, bien publicado... joer, asi da gusto.
    Anonimo=Maestro

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  3. Me gusta mucho como escribe maestro. Bien por ti y todos los demás

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