domingo, 19 de mayo de 2013

Riaza B-Pro 2013 (versión Jota)










  • Adversidades climatologicas para dar y tomar,   viento, lluvia, frio
  •  Adversidades del terreno:  barro, barro, barro, barro, barro, barro y mas barro
  •  Adversidades de los camaradas:  Toñin se raja de la de 80, le sigue David que tambien se raja Felipe y Agus ya lo habian anunciado

 Mas comentarios:
Creo que los de 40 la hicieron muy bien, al amigo Toñin creo que rompio la bici y se volvio, y luego le ponen en la clasificacion que ha entrada tercero,  Ja Ja Ja...
 
Los de 80,  nos dicen que han quitado algún tramo malo.  mentira, han quitado algun tramo pero no de los malos, las subidas infernales, los barrizales continuos, estaban como el año pasado pero muchisimo peor. Nada mas salir, me pego una hostia que me deja el hombro tocado y no puedo mover el brazo, por lo que no podia hacerme con la bici cuando patinaba en los barrizales, a si que cada dos por tres, al principio me volvia a caer, por lo que decidi irme bajando.
Carlos, Robert y yo nos ibamos turnando, que aunque no ibamos juntos, pues eso, a veces ellos delante a veces detras. la subida a la hermita de hontanares, que si el año pasado vi algun loco que intentaba subirla en bici, este año, imposible, ya que todo el terreno era un rio de barro. cuando llegue arriba, me puse morao de comer membrillos, quesitos, platanos ( ultima toma de fuerzas ) ya solo quedaban unsos 13 km. cuando llega Robert, me dice que esta llegando Carlos, pero yo hecho a rodar, y hasta la meta.

Bueno al final, muy bien, acogida en la meta de Agus, David, Felipe, luego llego la mujer de Carlos, nos fuimos despues al hotel donde habian dormido Agus y David, y me tome un bocata de lomo, queso y tomate, que me dejo nuevo ...

PARA QUE NO DIGAS QUE NO CONTAMOS NADA, 
ACABO DE VER QUE AGUS HA MANDADO ALGUN COMENTARIO,  ESTOY ESPERANDO LA FOTO QUE ME HIZO AGUS A LA ENTRADA, CREO QUE SE PUEDE APRECIAR EL BARROOOOOOOOO

el Zorro.

____________________________
_________


Amaneció un día soleado en Madrid y me pongo en marcha con los nervios típicos aliviando los excedentes de peso por aquello de ir más ligero (versión WC). Ya en marcha, a partir de La Cabrera se observa que la cosa se va poniendo fea. Nubarrones negros en el horizonte presagian lo peor. Coronando el puerto de Somosierra el termómetro marca 0º y la niebla no deja ver más allá de las narices. Y empieza a llover; una lluvia fina de las que calan a lo tonto, o más bien a los tontos.

En Riaza, a las 9:00, en el punto de encuentro veo a lo lejos a Javi, en el medio del campo de futbol, mirando a uno y otro lado:

    "Es la hora y aquí no hay ni el tato".


Nos comunicamos por guasá (como no podía ser de otra forma) pero lo de salir del coche como que cuesta horrores. Enseguida llegan Antonio, que como veis ha perdido la "J" (que cuente él por qué), Agus y David. Y pienso:

    "Cago en tó, al final voy a tener que salir del coche."

Allí estuvimos un rato esperando  a que pasara el tiempo como si no hiciera frio, como si no lloviera, con lo bien que se está en los bares o simplemente en el coche. Al menos es de agradecer, sin que sirva de precedente, el mérito de los que hacían la ruta corta que salían dos horas después y allí estaban dando ánimos, porque de las chavalas habituales… nada de nada y quien diga lo contrario miente como un bellaco o está cegato. Algún lugareño melenudo había pero poco más (si hubiera venido Juanjo otro gallo cantaría… o gallina). Mientras me retiro para preparar la bici llegan Roberto y Felipe.

Tras los saludos pertinentes, empieza la guerra sucia (nunca mejor dicho). Dos rutas a elegir: 40 y 80 km. La perspectiva no era nada halagüeña para ninguna de las dos. Los unos intentan convencer a los otros de que hagan la ruta contraria y viceversa. Al final los de la ruta corta se llevan el gato al agua arrastrando a Antonio y David, que se justifican con excusas baratas, quedando la ruta larga algo desangelada con Javi, Roberto y un servidor. Esto ya no es lo que era, aquí se aplica claramente uno de los lemas de este nuestro grupo "¡Pero cuanto intrusismo!"

Llega la hora de la salida. Javi y yo nos ponemos casi en primera fila para no desentonar. Roberto llega apurado y tiene que salir desde atrás. En la primera curva decido esperarle para hacer al menos los primeros kms. juntos. Javi tira hacia delante para evitar los típicos colapsos. Salimos por las primeras rampas de asfalto que nos sirven para calentar las piernas, la gente va muuuuy rápido “Ya lo pagarán” – pienso. Me entran unas ganas tremendas de mear pero a ver quién es el guapo que se para ahora para que le pase hasta el apuntador.

Nada más coger la pista nos damos cuenta de cómo pinta la cosa. Agua y barro por doquier que al principio intentamos sortear. Enseguida nos damos cuenta de que pasar por en medio de los charcos a toda leche era lo mejor no solo porque paradójicamente bajo el agua el terreno estaba más duro sino porque la gente extrañamente se apartaba. Estas enseñanzas se las debo al kamikace “va por ti”. Roberto coge mi rueda y vamos sorteando a la chusma no sin cruzar la bici en más de una curva al más puro estilo J.Lorenzo.

En seguida se complica la cosa; los charcos se convierten en barrizales y encima hay que vadear, por decir algo, un par de ríos.  No exagero si os digo que el agua casi nos llega a las rodillas. A mi lado una chavala a la que cortésmente le mostré el mejor trazado y un público entregado deseando aplaudir a raudales con su caída. Cruzó sin pestañear y mascullando “Os jodéis cabrones”: si señora, con un par. Me giro y no veo a Roberto, debió quedarse con la moza, buena elección.

Iniciamos una zona más sencilla que permitía meter plato. Alcanzo a Javi y, como buen “compañero”, no me paro ni a preguntarle cómo va. Le quito todas las pegatinas de “Specialized” que buena falta le hubieran hecho después a Antonio. Paso de largo por el primer avituallamiento allá por el km 19 y sigo dándole cera -sin mear- hasta el del 27 (a las 12:07), donde paro, charlo, bebo, como y guasapeo. Me lo tomé con tanta calma, tanto que me pasó Javi sin darme cuenta.

Al continuar noto las piernas un poquito atascadas. El frio y la humedad estaban haciendo su trabajo. Decido tomármelo con más calma para que luego no me pase factura. En cualquier cuestecita meto el molinillo y me pregunto “¿qué meteré cuando lleguen las cuestas más chungas?”.

En el avituallamiento del km. 46 paso a las 12:45 ¿18 kms en 38 minutos? algo no cuadra pero no me doy cuenta hasta mucho más tarde. Supuestamente quedaban 35 km a los que había que descontar 9 que la organización había recortado sumando un total de 71. En realidad los 9 kms. ya los habían recortado, de ahí mi tiempo en el último tramo, y los 35 que quedaban eran reales. Inocente de mí vuelvo a darle cera sin bajarme de la bici en ningún momento. Aquí coincido con Roberto pero decido seguir para no quedarme frio:

    “Ya te cogeré bajando” – me dice.

    “¿Bajando? Ni de coña” – pienso para mis adentros.

Llega una larga bajada en la que vuelvo a adelantar a Javi. Cuando le estaba quitando las pocas pegatinas que le quedaban me cuenta que se cayó al principio y que lleva toda la carrera sin sentir el brazo. ¿Y qué creéis que hice? Pues además de las pegatinas me faltó poco para quitarle los radios.

Me salto el avituallamiento del  56 porque  tocaba bajar y me sentía fuerte y en cuanto empieza el primer repecho me da el pajarón. Paro en un desvío y le pregunto a un paisano si se puede recortar y a punto estuve de hacerlo. Aprovecho para hacer mi “obra buena” del día: no, un planté un pino, sino que ayudé a un compañero de fugas a reparar el freno. En estas me pasa primero Javi y a muy poca distancia Roberto. Así que decido continuar al menos hasta el avituallamiento siguiente el de la ermita.

En buena hora. Para llegar a la dichosa ermita se sube por una trialera imposible por supuesto llena de barro e incluso nieve. Fue el único momento de echar pie a tierra. Cuando llego arriba encuentro a Roberto que se va sin esperarme anda que… menudos compañeros, jajaja. Destemplado y desilusionado decido entonces bajar directo a Riaza por asfalto y pasar de los últimos 13 kms que según comentaba la gente no eran precisamente de autopista.

Menos mal que no lo hice, llegado el momento del desvío pregunto a otro paisano y no me lo pone tan mal. Así que haciendo bueno el dicho de “pa lo que me queda en el convento…” aprieto los dientes, me olvido del molinillo por la pista sinuosa que nos lleva a Riofrio. Una vez allí comienza una hermosa trialera que atravieso como un rayo como si fuera triki comiendo galletas: piedras, piedras, barro y más piedras, ñam, ñam, ñam,…

Recojo los restos de Roberto que iba, ya con problemas en el cambio, hasta que le pierdo de vista. Luego nos enteramos que en su intento “desesperado” por seguir mi rueda reventó el cambio a falta de un par de kms.

El resto, os lo podéis imaginar. Entrada apoteósica en meta, felicitaciones varas, barro hasta en las orejas que aún esta mañana he expulsado por orificios varios, y  la sopa castellana que te pone las pilas.
Y el broche de oro: ¡me quedé en bolas para cambiarme de ropa... si a las canicas se les puede dar esa atribución! Como mi madre me trajo al mundo y ante la revolución que armé me dejaron adelantarme en la “cola” para limpiar la bici.

Un placer señores, un placer.
¡¡¡CHUAAAAA!!!
 
el Brujo.
Galeria de Fotos

2 comentarios:

  1. Como os haceis de rogar, mamones¡¡¡¡¡ ja,ja,jaaaaa.
    Desde luego sois unos mostros, 71 Km en esas condiciones¡¡¡¡¡¡
    Ya me voy enterando de algo, veis... Falta la carrera chica y saber que le ha pasado a Jantonio...

    PUBLICIDAD...
    Gracias por usar HOTMAIL. En nuestro afan de hacer de HOTMAIL una herramienta esencial para Usted, queremos promocionar su utilizacion. De esta manera por cada diez correos que escriba le pagamos una MAHOU bien fresquita... Y si llega a veinte correos le incluimos la TAPA... Por el bien de todos, UTILICE HOTMAIL. El uso indiscriminado de GUASA genera IMPOTENCIA. NO utilice GUASA.

    ResponderEliminar
  2. Muy buenas crónicas JRAIDERS, poco más me queda por añadir, sin duda fue un día donde tuvimos que tirar de JJJJJÉPICA.

    Eso sí, cuando subíamos, perdón escalábamos las rampas de la ermita (25% - 30%, + o -, calculo), oía la voz de Jorge que salía entre los hermosos pinares que divisábamos a nuestro truncado paso, que decía algo así como “estas trialeras a ver si van a ser de bajada y nos estamos liando” , jajajajaja. Máquina se te echó de menos, como ves estabas presente en mis oraciones.

    Fue un placer, para el año que viene la hacemos pero con las copas del sábado por la noche, EN RIAZA CLARO, A TOPEEEEEEE.

    ResponderEliminar